El equipo de la UGC de Cirugía General del Hospital Universitario Virgen del Rocío relata su visión del proceso que les condujo a la certificación ‘Excelente’
La excelencia es el sueño que todo profesional tiene cuando ejerce su profesión, pero en la medicina, y en concreto en la cirugía, la perfección en el trabajo incluye no sólo la satisfacción personal si no también una repercusión en el paciente, en la calidad de la atención que recibe y que percibe, y en los resultados.
Nuestro camino en el proceso de certificación comenzó hace más de 8 años cuando nuestro jefe de servicio, el Profesor Padillo Ruiz, colocó la piedra inicial con aquel certificado de unidad certificada en nivel ‘Avanzado‘. En aquel momento, una palabra como estándar, que ahora es más que de uso común, nos parecía un jeroglífico.
Tras ese primer y exitoso contacto, de la mano del Dr. Felipe Pareja, y con un trabajo en equipo realizado sobre las bases que 4 años antes se habían asentado en nuestra unidad, conseguimos la certificación con el nivel ‘Óptimo‘. Un camino no fácil, pero sí menos angosto que la primera acreditación.
En ese momento nos debatíamos entre la recompensa al trabajo bien hecho y la posibilidad de mejora. Nuestra UGC es una unidad compleja, con más de 55 enfermeros, más de 40 auxiliares y más de 65 facultativos especialistas, incluyendo jefes de sección y de servicio, fellows y residentes.
Todo este personal se encarga de gestionar una carga asistencial de más de 15 consultas externas y 54 quirófanos semanales. La unidad realiza más de 3000 cirugías programadas por año, a lo que debemos sumar las cirugías ambulatorias, más de 1700, o las intervenciones urgentes, próximas a las 1.000 cada año.
Nuestra unidad de gestión asocia, además, un intenso trabajo docente y de investigación con 13 profesores acreditados contratado doctor, 3 profesores titulados acreditados y un catedrático y un factor de impacto medio en el último año que supera los 5.5 puntos.
Con todos estos números, sabíamos que conseguir la excelencia iba a suponer un giro más, una implicación mayor, pero merecida, para nuestros pacientes y todos nuestros profesionales, que cada minuto, cada día, se esfuerzan en hacer su trabajo precisamente así, de forma excelente.
Por este motivo, y con el compromiso de reflejar nuestro sentir y nuestra manera de hacer las cosas, comenzamos a trabajar casi inmediatamente tras obtener el nivel óptimo para poder seguir creciendo y optar así a la certificación con calificación de excelente en el siguiente ciclo, 5 años tras la calificación ‘Óptima’.
Para llegar a nuestro objetivo, la implicación de todo el personal ha sido esencial pero, en particular, un grupo de profesionales de la unidad, al que nos gustaba llamar “el equipo”, formado por enfermeros, auxiliares y facultativos, que han trabajado codo con codo para poner a punto todos los engranajes, para pulir todos los detalles y conseguir que esa cultura de excelencia ya arraigada en nuestros profesionales, fuera además patente para los evaluadores.
Y así fue. Finalmente, en enero de 2023, hemos obtenido la certificación de unidad certificada ‘Excelente‘.
Pero esta pequeña historia no estaría completa sin los agradecimientos a la Unidad de Calidad de nuestro hospital y a la propia Agencia de Calidad Sanitaria de Andalucía, que nos han guiado y facilitado en todo el proceso.
Nos gustaría presentaros en el video algunos de los miembros que hacen excelente nuestra unidad y el significado que para ellos tiene la acreditación excelente.
Un abrazo a todos.